Si bien el juego cubre toda la campaña, me decidí a desplegar directamente el escenario de Waterloo/Wavre.
Las fuerzas Anglo-Aliadas ya han tomado posiciones en las inmediaciones de Waterloo y esperan la llegada de las fuerzas de Napoleón.
Y el Pequeño Corso llega puntual a la cita y no hará esperar mucho al Duque de Hierro.
Mientras los prusianos se lamen las heridas que el Monstruo les ha infligido en Ligny y esperan la oportunidad de acudir al sonido de los cañones.
¿Donde esta Grouchy?????????
¿Conseguirán los Aliados unirse?
Este es un juego de reglas sencillas y por el que ya se nota que ha pasado el tiempo, pero que retiene el atractivo de la sencillez y la simplicidad. Los jugadores de Wargames siempre vamos en busca de la novedad, yo el primero, pero a veces son estas viejas glorias las que nos recuerdan que para pasar un buen rato lo sencillo es, también, una buena opción.
Por no hablar de esas pequeñas obras de arte que son los counters!!!!!! (Lo siento pero tenia que decirlo ;))
Oye y ay que lo comentas que tal el Last days? es un juego del que no hay mucha información y me compre un poco por tener un juego de waterloo y ver si me gustaban los juegos de Zuckher
ResponderEliminarPufff!! Roi... que decirte de los diseños de Zucker. Amado y odiado a partes iguales en este mundillo, para mi sus diseños de las campañas Napoleónicas se encuentran entre lo mejorcito de los Wargames. Me gusta sobretodo el como implementa el uso de la caballeria ligera y sus distintas funciones, descubrir las unidades enemigas, cubrir las tuyas propias de los ojos del enemigo, hacer de pantalla en las retiradas, etc. The last days condensa todas estas estrategias en una zona de operaciones muy reducida y eso lo hace muy atractivo. Pero, quede claro, estas hablando con un enamorado de los diseños de Zucker. Pruebalo, no te decepcionara.
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